la razón fundamental que me mueve a abrir esta nueva ventana al mundo, es la necesidad perentoría que tengo por tratar de prevenir a las nuevas generaciones sobre serios peligros que presenta la vida y que sin advertirlos conviven en el día a día.
Dentro de las cosas naturales que nos ayudan en esta tarea, la primera es la misma naturaleza, como la conocemos. La segunda, en estas selvas de cemento que nos hemos construido los humanos, es indudablemente La Calle.
La cerveza bebida histórica, prehistórica, hasta mitológica, producto si bien industrial pero antes casero, ideal para saciar la sed de multitudes, grandes fiestas donde hay que darle de beber al populorum, y también la de la reunión de jóvenes de todas las edades…. Bebida amada, idolatrada, que la llevamos casi ya en el ADNsocial…. Esa bebida con la que crecimos, traspusimos, recontra pecamos i nos llevara a realizar cosas tan tremendas que sin ella quizá nunca hubiéramos traspasado nuestras posibilidades, hoy muy a mi pesar, he de llegar a todos no con una copa en la mano sino como un testimonio de vida.
Tanto en el barrio como en el colegio siempre quedaba como el más niño, por haberme puesto tan temprano al cole, o talvez cuando cansada de mi mal comportamiento en salón, la señorita Rosa me pasó cogido de la oreja i sin mayor examen del Jardín al salón de transición, ganando o quizá perdiendo un año de vida. En el barrio mis primeros amigos cuando yo tenía 12 ellos iban desde los 14 a más….. empecé también adelantado con todas las malas costumbres, empezando todo desde muy temprano con acomodos y casi siempre pecados de esas edades.
Empecé a tomar ron, caña, vino, i casi siempre la cerveza decía presente. Aclarando que los eventos antisociales o de carácter policial se verán en otra entrega, pasamos de frente hasta nuestros días, donde mi cuerpo seguramente cansado de tanto castigo, ‘es que sino lo castigas jamás aprenderá a defenderse’, sí pero bueno es culantro pero no tanto, mi cuerpo digo empezó a resentirse i al mismo tiempo visitar hospitales con exámenes i análisis de todo tipo….
Quién no podría sorprenderse cuando todos ellos indicaban, ‘Señor usted no tiene nada….’ Nada bueno supuse yo casi en broma….no en serio mire usted mismo….pero doctor usted me ve caminar apoyado en dos bastones y me duelen hasta los pelos…
Recetas i dietas pero ellos tercos con que no tengo nada… no diabetes, no riñones, no hígado, circulación ya yo la quisiera tener me dijo el otro doctor.
Entonces mi pasado me empujaba a cada vez que medio me sentía mejorcito, volvía por las andanzas, así hasta que ya no solamente era dolor, sino empecé a hincharme de los tobillos de ahí saltaba a las rodillas, hasta que un día se me hincho muñeca i mano derecha, llegando a la inutilidad, que tuve que volverme zurdo para comer, para limpiarme el poto y lavarme. Hasta pa la masturbación pues los que usamos el amor hasta romperlo, cuando no lo tenemos acudimos muchas veces donde la famosa María Manuela Pajares viuda de Palma de la Mano, para el sosiego. Siempre el trago predominante la Cerveza.
Visitaba el hospital para que me digan lo mismo, ‘usted no tiene nada’, hasta que cierto día el doctor de turno me dice que ha llegado de Lima el Hospital Itinerante de atención ambulatoria i que estaba acantonado en sendas carpas en los patios de cocheras del hospital Reátegui… Me trasladé con mis bastones i me situé en la cola de la especialidad de Endocrinología, que era lo que me interesaba…. Cuando llegó mi turno, la doctora me quiere echar por hacerle perder el tiempo pues no estaba en la rigurosa lista que ella debía atender….. ah no, le dije a viva voz, de aquí no salgo sino me atiende, mire no puedo ni caminar de dolor y menos sin bastones, … por lo que ella me corta diciendo ‘vengo ya cansada desde Lima por toda la costa, para que encima tenga que aguantar sus gritos’…. Finalmente i viendo mi decisión y más aún mi necesidad y angustia, la linda dama accedió…. Revisa mis análisis i el ‘no tiene nada’ salió a flote….. lo mismo dije yo, por eso estoy aquí forzando esta consulta…. Bueno ella prosiguió y se dispone a llegar a mi hinchado tobillo derecho, en eso se detiene y mirándome a los ojos hacia arriba me dice, disculpe señor usted toma tragos…. La verdad por delante, desde niño doctora, durante 55 años promedio dos veces a la semana, con jornada completa, i con todos los juguetes inventados…. Dios mío, exclamó, señor usted no tiene ni rasgos de vitamina B en su cuerpo, la elimina i a eso se deben todos sus males sin cambiar sus rangos de salud en los demás órganos.
Inyección doble i vitamina B a pastos B1 B12 se dispondrían a mejorar mi, no tanto salud, como sí la sensación de dolor e hinchazón de tobillos muñecas manos rodillas i pies. Bueno, lograr aquello ya era bastante.
Sin embargo estas mejoras empezaron a ser menos frecuentes y durante cinco años viví en esa dicotomía de beber o no beber…. Decía en mi descernimiento ‘yo que he bebido toda una vida y por ello no he llegado a ser un profesional, ni tampoco un futbolista de exportación, ni menos un artista como me propusieran alguna vez’, yo un desperdiciado por esa inocente cervecita de un día sí i al otro también, incluido ‘el miércoles, que no tiene corona pa no tomar’, un dipsómano por la cervecita…. Tacho ya te puedes haber tomado por lo menos dos traylers con carreta repletos de chela…. Decía un amigo después del fulbito dominical que pasábamos al fulvaso…. a lo que el amigo Reynaldo a modo de réplica y sorna me pregunta ‘Tacho pero aunque sea puedas haber pagado el 10% de todo lo que te has bebido’…. La risotada general… era casi un héroe de la pendejada…. Ídolo de barro de la muchachada.
Quien diría que en esto de dejar de tomar chela cambiando la receta hacia el aguardiente, se me fueron ausentando los dolores e hinchazones de miembros. Entonces, casi en contraparte regresa mi amigo de la ruta del Oleoducto, que cuando cumplía con el régimen de 17x13, llegaba que quería tomarse el mar. Cómo decirle que no, quién soy yo para oponerme, i vuelta a la dolce vita del cebichito y la chela cuello e cóndor. Y qué creen, sí regresaron los males, la hinchazón de todo en el cuerpo menos de la que sí se debe hinchar de felicidad. No puede ser que los tragos de aguardiente me sean menos dañinos que los de riquisísima chelita.
Pasé 15 días sin poder salir con una mano inútil, pero me puse a investigar preguntando al famoso Google el por qué de unos inocentes vasitos de cerveza me harían tanto daño… Eureka encontré la respuesta.
Cerveza bebida espirituosa, producto a partir de la cebada i otras, que combinadas con el importado europeo lúpulo, después de doble proceso de fermentación y sometida a grandes temperaturas logra finalmente esas aguas verdes que a todo cristiano resplandece, para darle toque de verso…. Sírvase bien helada. Todo es bello hasta este momento, incluso te dicen en un hipócrita aviso ‘tomar en exceso puede ser dañino para la salud’ y hasta podemos añadir la foto de un preclaro amigo como posible mala consecuencia de dicho exceso.
Pero en que momento del proceso se puede volver dañinas estas ricas aguas, con calificación tan baja en alcohol. La mayoría no excede el 5.5% de alcohol. Claro que eso no se especifica en etiquetas ni en publicidad, ni locos. No se dice pues que la cerveza es talvez la única bebida de esas que alegran el alma, que es sometida a doble fermentación. Es en este proceso y con sus ingredientes que aparece una sustancia llamada HISTAMINA que ya no se puede eliminar del producto final, y ni locos para así hacerlo, como veremos enseguida.
Existen dos clases de histamina, la que produce nuestro cuerpo en sus sistemas de defensa luchando contra las alergias principalmente, y la que se produce a partir de la fermentación de ciertas sustancias, y es introducida al cuerpo como bebida o alimento sólido, la cual es muy dañina dependiendo de cuanto mal hace la disposición del individuo que la recibe…
Ayyyy churchil, que así era la cojudeza…. Ojo que todo se encuentra en Google.
Este exceso de histamina deja de ser beneficioso y en cambio se manifiesta en dolores de cabeza, hinchazón de diferentes órganos, así como manifestaciones en el rostro, esa cara de alcohólico con tan poquito alcohol se lo debemos pues a esta Histamina. Pero no sólo esto, también produce ansiedad y adicción por ella. ‘Preso por mil preso por cinco mil’, siempre decimos antes de meternos con todo al volantín con todos los juguetes incluidos….
‘Y que importa mañana la condena si estuvo un rato el corazón contento’ decimos resignados al malestar del día siguiente, al cual le inventamos un nombre famosísimo, ‘el corte’. Cuando no se escucha el ‘Ya tomaste ayer ahora no sales’. ‘Amorcito si a mi no me gusta tomar sino que tomo para poder cortar’ con el chilcano, leche d tigre, la parihuela, el cebichito, las conchas negras y la de abanico a la parmesana…. ‘Échame otra copa hermano, para aliviar mis penas’. O como decía el finado David, ‘aquí primo suicidándome con langostinos’.
Problemas respiratorios es otra de las consecuencias de la ingesta de histamina. Al aumentar de tamaño los órganos adyacentes, presionan el esternón i diafragma dificultando la respiración. Cuántos muertos de esos que estaban bien y de repente se murió de ‘chucaque o dolor al costado’ como dicen nuestros cholos, o de Dios sabe qué. Los grados de alcoholismo por ingesta de cerveza, dada su bajo porcentaje de alcohol son bajísimos, sin embargo la figura del cervecero lo pone en evidencia con la barrigaza donde se le dibujan el hígado y otros órganos que se hinchan irremediablemente, a tal punto que finalmente lo único que no se hincha es aquello que sin hinchar no funciona.
Así las cosas realicé la última prueba con la rica cervecita, con motivo esta vez el cumple de un dilecto amigo. Su hijo me conmina, ‘Tío no puedes fallar tú eres su mejor amigo’. Bueno pues haremos la última prueba, esta vez con full antihistamínicos….. día de chela con jornada completa, acompañada de ciertos juguetes como aditivos…. El corte ya fue a pura pastilla, Le metí dos días de cetiricina americana, más fue lo que me dio sueño, porque igualito empecé a hinchar al segundo día, tal cual la foto adjunta….
Todo esto es real. Luego de pasar semana en cama sin salir, me fui recuperando y a la fecha ya llevo dos de cañaña i no me pasa nada, normalote…. Finalmente gané la batalla, pues al tiempo que ya no puedo ni probar la chela, que lástima, al menos ya sé cuál es el origen de mis males, dubitación dicotómica que no me dejaba vivir ni beber tranquilo….ahora los amigotes no tendrán ya que asegurarme un radio de 12 tubos, sino dos botellas del rico Caribeam Rum acompañado de todas las falsedades que se pueda.
Esta historia, testimonio de vida, llega a ustedes por cortesía de Cañaña Stones.